Gracias a los cuidados del olivar respetando sus ciclos y siendo respetuosos con el medio ambiente y los recursos hídricos, nuestros olivares se encuentran en perfecta armonía obteniendo de ellos un aceite de oliva ecológico de primera calidad.
Obtenidos con la sabiduría que da la experiencia, la vocación, y el esfuerzo de quien busca la superación constante, nuestro aceite se caracteriza por su procedencia de cultivo ecológico y por su intenso sabor. La cosecha se realiza en el momento de mayor expresión aromática y gustativa de la aceituna consiguiendo un aceite virgen extra ecológico de sabor y calidad extraordinario.
Todo el proceso, desde el cultivo de la tierra hasta la elaboración del aceite, se realiza con sumo cuidado y controlando hasta el más mínimo detalle, nada se deja al azar, desde la selección de los olivos hasta el control de calidad y conservación del aceite elaborado con el máximo esmero.
Con aceitunas recién cosechadas del campo y transportadas con cuidado para evitar la rotura del fruto, la extracción se realiza en frío, para conservar sus propiedades biológicas y obtener la mayor calidad, tanto en los aceites monovarietales como en los coupages, obteniendo un aceite equilibrado y estable, con cuerpo y sabor, que no te dejará indiferente.
Arbequina, AOVE monovarietal suave y ligero, de textura delicada, dulce al paladar, sin apenas tintes picantes o amargos, con un aroma afrutado de aceituna, manzana, plátano y almendra.
Combina muy bien con vegetales y pescado, así como en platos delicados, salsas y repostería, dando un toque de sabor sin ocultar los demás ingredientes.
Picual, AOVE monovarietal muy estable de gran fuerza y cuerpo, con aroma frutado de herbáceos, tomatera y frutas en verde. A nivel gustativo su entrada es dulce, con un ligero picor y amargor, característico de esta variedad, resultando un aceite de cuerpo equilibrado y elegante.
Este aceite tiene una gran estabilidad, debido a que es muy rico en polifenoles y alto contenido en ácido oleico, que se asocia a la reducción de riesgos de enfermedades cardiovasculares y hepáticas, así como una gran cantidad de antioxidantes naturales. En el saludable ácido oléico, supera al resto de los aceites en casi un 10%, siendo muy recomendable para niños y ancianos.
Se puede usar tanto en ensaladas y platos fríos para potenciar su sabor, como en frituras, rebozados, empanados y cocinados, ya que esta variedad admite altas temperaturas y respeta los alimentos, puesto que mantiene sus propiedades en varios ciclos de frituras.
AOVE proveniente de nuestros olivos centenarios: cada año seleccionamos aquellos olivos que por la calidad de su fruto formaran parte de un aceite exclusivo para el paladar. Destacando la variedad Royal, Changlot Real o Cuquillo, variedades muy antiguas que son autóctonas de las zonas sur y levante español.
Se trata de olivos que tienen más de 150 años, llegando a sobrepasar los 250. Son olivos que han sobrevivido al paso del tiempo y en Finca Fuensanta hemos querido recuperar la esencia de estos olivares antiguos, que generosamente nos ofrecen un fruto y un aceite claramente diferenciador.
Predominan en este AOVE un sabor dulce con aroma afrutado intenso en los que destacan las notas a higuera y almendra. Aceite muy equilibrado y estable con amargos y picantes en intensidad suave, con el podrás disfrutar de los sabores de antaño.
Aceite de sabor intenso, fresco, muy estable y saludable como el Picual, pero sin las notas picantes de este.
Muy aromático de frutos secos como la nuez y el cacahuete, con gran equilibrio entre el amargo y los toques dulces, llegando a apreciarse incluso toques de aguacate y de la huerta.
Resulta muy adecuado para salteados y fritos debido a su alto contenido en polifenoles. Se usa en ensaladas y vinagretas, donde se aprecian sus matices a frutos secos, así como en parrilladas de verduras y pescados donde potencia sus sabores, incluso en conservas.
Diversos estudios han comprobado las cualidades nutricionales del aceite de oliva virgen extra (AOVE), que se sitúa como uno de los pilares básicos de la dieta mediterránea, así como sus efectos beneficiosos para la salud, gracias a los diferentes componentes naturales que se encuentran en el aceite de oliva, como la gran cantidad de polifenoles, grasas monoinsaturadas y vitaminas A, D, E y K, podemos afirmar que:
Previene las enfermedades cardiovasculares, gracias a los ácidos grasos presentes en el aceite de oliva virgen, y en concreto el ácido oleico, (ácidos grasos monoinsaturados) que ayuda a reducir los niveles de colesterol malo, mientras que aumentan los niveles de colesterol bueno, estos ácidos incrementan la vasodilatación arterial, mejorando la circulación sanguínea, disminuyendo la presión arterial y el riesgo de ataques al corazón.
Disminuye la incidencia de complicaciones en los pacientes con diabetes mellitus tipo II. El aceite de oliva virgen extra es rico en grasas monoinsaturadas que promueven los niveles saludables de insulina, de esta manera, ayuda a mantener un nivel bajo de azúcar en sangre. Por eso se recomienda tanto a personas que sufren diabetes como a pacientes que corren el riesgo de desarrollar enfermedades del corazón.
Sus propiedades anti-inflamatorias ayudan en la curación de problemas de la vesícula biliar y del tracto urinario. Mejora la absorción intestinal de los nutrientes, ayudando a combatir el estreñimiento.
El aceite de oliva cuenta con una gran cantidad de oleatos que ayudan a una correcta calcificación y mineralización de los huesos, por ello está recomendado en la dieta de los niños durante el crecimiento y también para los ancianos, pues consumido en la edad adulta regularmente, limita la perdida de calcio que se produce en el envejecimiento, y en consecuencia patologías como la osteoporosis.
Posee un elevado contenido en antioxidantes fenólicos, como la vitamina E y K, así como polifenoles que retrasan el proceso de envejecimiento y mejora la salud de la piel. La gran cantidad de polifenoles que posee el aceite de oliva virgen extra tiene una acción antioxidante, previniendo el envejecimiento celular y también la formación de células cancerosas. Estos antioxidantes con propiedades anti-inflamatorias, ayudan a reducir el riesgo de inflamación crónica en las células.
Diversos estudios relacionan el aceite de oliva con la reducción del riesgo de cáncer de mama (relacionado con el consumo de grasa saturada de origen animal), y también el riesgo de cánceres del tracto respiratorio y del tracto digestivo, todo ello gracias a un componente del aceite de oliva virgen extra, el polifenol olecantal, que precipita la muerte de las células cancerosas